
Con un concierto electrizante en el Autódromo de Querétaro, Enrique Bunbury dio inicio oficial a su gira internacional “Huracán Ambulante Tour 2025”. El evento, con entradas completamente agotadas, marcó no solo su esperado regreso a México, sino también el reencuentro con su histórica banda El Huracán Ambulante y la presentación en vivo de su más reciente álbum, Cuentas Pendientes.
Durante dos horas intensas, Bunbury recorrió gran parte de su extensa discografía, combinando clásicos con nuevas composiciones. “El Huracán Ambulante azota Querétaro”, tituló el Diario de Querétaro, aludiendo a la potencia del espectáculo y a la entrega del artista sobre el escenario. El medio destacó la conexión emocional que el músico mantuvo con el público y la calidad del repertorio seleccionado.
Por su parte, la revista MariskalRock calificó el concierto como “uno de esos conciertos inolvidables”, haciendo énfasis en la emotividad de canciones como “Lady Blue” y “Las Chingadas Ganas de Llorar”, así como en la fuerza con la que abrió el show, con una suite musical inspirada en Nino Rota.
El escenario reunió a la legendaria formación de El Huracán Ambulante: Ana Belén, Ramón, Copi, Del, Enrique, Jordi, Luismi, Javi y Javi Peta, quienes aportaron al show una energía contundente y nostálgica para los seguidores más fieles del zaragozano.
La gira Huracán Ambulante Tour 2025 recorrerá nueve países, con próximas fechas en Ciudad de México y Monterrey.
Un proyecto multidisciplinario
Semanas antes del arranque de la gira, Bunbury lanzó el mediometraje Cuentas Pendientes, una obra cinematográfica donde varias historias confluyen en una cantina imaginaria en América Latina. En ese escenario simbólico, el artista interpreta varios temas del nuevo álbum: “Para Llegar Hasta Aquí”, “Las Chingadas Ganas de Llorar”, “Te Puedes a Todo Acostumbrar” y “Loco”, este último también disponible como videoclip independiente.
El álbum Cuentas Pendientes ha tenido una gran acogida: a inicios de mayo, alcanzó el puesto número 1 en ventas físicas y digitales en España, reafirmando el vínculo entre Bunbury, su público y la crítica especializada.