
El asesinato de Nawar Jiménez, reconocida lideresa trans y defensora de derechos humanos en El Carmen de Bolívar, sacudió al país este 22 de mayo. Su cuerpo fue hallado sin vida en una cuneta de la vía que conecta con San Jacinto, en circunstancias que aún están por esclarecerse. La comunidad LGBTI+ y organizaciones sociales han condenado este nuevo acto de violencia que refleja el abandono estatal y la brutalidad persistente contra las personas trans en Colombia.
Nawar era una figura clave en los procesos de memoria y reparación colectiva de las personas LGBTI+ en Montes de María. Desde la Casa de Paz, tejió redes de apoyo para poblaciones racializadas, desplazadas y empobrecidas, convirtiendo su propia historia de exclusión y dolor en una lucha incansable por la dignidad y el reconocimiento de derechos. Su liderazgo fue respaldado por Caribe Afirmativo, que la destacó como una “tejedora de comunidad” y símbolo de resistencia.
Este crimen ocurre exactamente dos años después del feminicidio de Dania Sharith Polo, conocida como “La Pola”, también mujer trans y activista del mismo colectivo. Ambos casos encienden las alertas sobre los ataques sistemáticos contra lideresas trans en la región. Las organizaciones exigen una respuesta urgente del Estado y medidas efectivas de protección.