El final de una era ha llegado en el Santiago Bernabéu. Luka Modric, leyenda croata del Real Madrid, ha anunciado que no continuará en el club blanco tras concluir su contrato el próximo 30 de junio. La decisión, que ya ha sido comunicada por el propio jugador a través de sus redes sociales, marca el cierre de un capítulo glorioso que comenzó en 2012 y que se prolongó durante 13 temporadas.
“Ha llegado el momento. El momento que nunca quise que llegara, pero así es el fútbol, y en la vida todo tiene un principio y un final…”, escribió Modric en una emotiva carta publicada este jueves. Su último partido con la camiseta blanca será este fin de semana ante la Real Sociedad, en el cierre de LaLiga.
Una trayectoria inolvidable
Desde su llegada procedente del Tottenham, Luka Modric se consolidó rápidamente como una pieza fundamental en la columna vertebral del Real Madrid. Convirtió la medular merengue en el motor de un equipo que conquistó el mundo. A sus 39 años, su vigencia futbolística asombró a propios y extraños. En total, disputó 589 partidos y levantó 28 títulos, incluyendo 6 Champions League, 4 Ligas, 2 Copas del Rey y 1 Balón de Oro, entre otros logros.
Modric fue mucho más que estadísticas: fue el arquitecto del juego, el líder silencioso, el genio de Zadar que comandó remontadas imposibles y noches mágicas en el Bernabéu. La conexión con la afición traspasó lo deportivo y se convirtió en un vínculo emocional difícil de igualar.
El adiós más difícil
“Jugar en el Real Madrid me cambió la vida como futbolista y como persona. Me siento orgulloso de haber formado parte de una de las épocas más exitosas del mejor club de la historia”, expresó el mediocampista croata en su despedida.
El club ya prepara un homenaje especial para este sábado en el Santiago Bernabéu, donde se espera una gran ovación en reconocimiento a uno de los jugadores más emblemáticos de la historia reciente del club.
“Me voy con el corazón lleno. Lleno de orgullo, de gratitud y de recuerdos imborrables. (…) Aunque ya no vista esta camiseta sobre el césped, yo siempre seré madridista. Nos volveremos a ver. El Real Madrid siempre será mi casa. Para toda la vida. Hala Madrid y Nada Más”, concluyó.
El legado del eterno número 10
El adiós de Luka Modric no solo deja un vacío en el mediocampo blanco, sino también en la memoria afectiva del madridismo. Su legado perdurará en los libros de historia del club, en las vitrinas de trofeos y, sobre todo, en el corazón de los aficionados. Se va una leyenda. Pero su huella es imborrable.